martes, 20 de noviembre de 2012

ALCARRÀS-FRAGA


Hoy, martes ha estado todo el día lloviznando y el viaje se ha hecho bastante pesado y monótono.

A las 8 de la mañana he salido hacia Fraga. La primera mitad del viaje la he hecho por la carretera nacional, pero después he vuelto a coger el Camino de Santiago.

He llegado a Fraga a las 4 de la tarde y me he dirigido hacia el Ayuntamiento donde la Gloria ya les había informado de mi llegada. El asistente social me ha recibido y me ha llevado hacia la residencia Sagrado Corazón de Jesús. La encargada de la residencia, Elisabet me ha llevado a una habitación para 10 personas donde he encontrado un señor que se dirige hacia Barcelona y que también pasará la noche. Es bueno encontrar compañía después de tantos días. Luego, la misma Elisabet me ha dado la cena.

Mañana tenía previsto llegar sólo hasta Candasnos, pero tendré que hacer más recorrido e ir hasta Peñalba, que está a unos 34 kilómetros de Fraga. La razón: Candasnos es un pueblo tan pequeño que no tiene albergue y no encontraría lugar para pasar la noche. Por estas tierras empieza a hacer frío.

Hoy he pensado mucho en una amiga mía y le quiero dedicar el trayecto. Se trata de Arancha, de Icod de Vinos, Tenerife. Resulta que Arancha, a consecuencia de una operación, quedó inmovilizada de cintura para abajo. Vive en un piso pequeño, con unas escaleras muy estrechas y, como en su casa no tienen suficientes recursos, no puede salir a la calle desde hace algunos años. Un abrazo muy fuerte, Arancha y mi recuerdo desde estas tierras.

Lo que no me llega a entrar en la cabeza es como un gobierno puede estar haciendo lo que hace con la sanidad. Recortan los recursos económicos y personales de los hospitales, cobran un euro por receta a los pensionistas (algo que, según están diciendo en algunos países, no es demasiado legal), sacan el derecho a la sanidad para las personas sin papeles, a los inmigrantes con papeles les reducen las prestaciones, quieren privatizar hospitales públicos muy importantes y que diariamente atienden a miles de pacientes, han detenido procesos de investigación muy importantes, reducen el personal médico de los ambulatorios ...
Y nuestros derechos?

¿Cómo es posible pasarte la vida con una retención del sueldo para financiar la seguridad social; pagando puntualmente nuestros impuestos y, que cuando un día necesitas asistencia te encuentres que, según cuál, no la podrás recibir. Si incluso tengo una amiga con cáncer, que vive en el pueblo y si se quiere trasladarse para recibir la quimioterapia, se debe pagar la ambulancia de su bolsillo!
Es indignante!

Donde han quedado los derechos de las personas? ¿Cómo puede ser que el dinero que entre todos, y con tanto esfuerzo, estamos pagando vayan a parar para tapar agujeros de los bancos en lugar de convertirse en servicios para la población? Como se puede priorizar los intereses de entidades bancarias (que luego resulta que continuamente van publicando sus beneficios) a los intereses de las personas de quienes sale ese dinero?
Es evidente que nos hemos de mover!

Esta situación es realmente insostenible. Y que no nos vengan con más mentiras de que hemos gastado en demasía, porque eso ya no se lo traga nadie! No podemos permitir que un gobierno, elegido democráticamente, se gire en contra de su población de este modo y sólo defienda las empresas que se quieren quedar con la sanidad pública.
Es intolerable!

Peñalba


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